Centro Cultural de Aikido

Nos complace informar a toda la comunidad de Aikido y otras disciplinas, la realización del encuentro-retiro del Movimiento de “Aikido y la Paz”. Iniciativa que surge a raíz del estudio de un aspecto muchas veces olvidado de las enseñanzas de O´Sensei, su increíble visión de la vía de la Paz. Reflexiones que se encuentran en esencia, completamente entrelazadas en cada técnica del Aikido, sus Dokas, sus Kotodamas, sus caligrafías, son el alma que sustentan el Arte de la Paz y que como dijera Masahisa Goi, líder creador de la plegaria por la Paz en el Mundo ”Después de haber encontrado a Morihei Ueshiba y de fundirme con él en el mismo corazón, podemos decir que el Aikido y la plegaria por la paz en el mundo comparte el mismo origen, si bien lo manifiestan de formas diferentes”. Nos hace reflexionar sobre cual ha sido nuestra contribución como seres humanos y aun más como Aikidokas representantes de una de las disciplinas que tiene mucho que aportar sobre la Paz en el Mundo. Es por esto que nuestras jornadas las realizamos en un lugar de peregrinaje y reflexión sobre la vida, como lo es el Templo de Eka Chacra en Catemu, Finca Ecológica con más de 7 hectáreas, bosques, rió y todo un entorno natural donde los monjes del Templo cuidan y salvaguardan esta belleza Natural que nos invita a reflexionar sobre el mensaje de Paz del Fundador y ha forjar nuestro espíritu en su pensamiento “trabaja sobre ti mismo y sobre la tarea que te ha sido encomendada en el Arte de la Paz y luego aplica el arte a todo lo que encuentres”. Es por esto que nos reunimos un grupo de Docentes y Amigos del Aikido, en donde las clases que se dictan están relacionadas sobre la práctica y el pensamiento de Paz de O´Sensei. Además, profesores de disciplinas afines, colaboran gentilmente en la jornada, entre los cuales destacan el Yoga, Zazen, Charlas de filosofía Védicas, Mantra Yoga. Así que a prepararse para compartir las enseñanzas y el mensaje del Fundador en este entorno natural y sano, siendo el mismo Morihei Ueshiba quien dijera “Quienes practican el Arte de la Paz deben proteger la esfera de la Madre Naturaleza, el divino reflejo de la creación y mantenerla preciosa y fresca”.